Espejo nubloso al final de un callejón,
si me miras así no me dejas otra,
que seguir evitando tus ojos.
Aunque estén solo en mi mente,
entre abierta y silenciosa, esperando
tu ataque, perseverante y acidoso.
Porque lo que dejaste aquí de tu reflejo,
hace imposible refractar otra cosa.
Y nunca me ha gustado contemplar,
una tina llena de recuerdos flotando
absurdos, y aunque el agua siga tibia,
ese caldo de ideas siempre sabrá a veneno.
© Liza Lindmark
miércoles, 12 de diciembre de 2007
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7 comentarios:
Quizás sepa a veneno, pero quizás el veneno es justo lo que quieres como condimento... casi siempre mejora las cosas... igual recomiendo que tengas un antídoto cerca...
ni yo entiendo mi comentario...
besos, e.
Ideas con sabor a veneno??
Eso suena peligroso!
Me quedo con este verso final:
"ese caldo de ideas siempre sabrá a veneno".
y estas palabras no son otra cosa que raíces y latidos en el caldo de este amor que aún no se fermenta...
Besos, Lizzie :D
Ante todo muchas gracias por haber entrado a mi blog. Y no se si crees en las coincidencias o en las premoniciones,pero tambien soy de virgo.
He recorrido un poco de lo que escribes y en verdad que me ha gustado.
Si lo permites quisiera llevarte a mis links y amarrarlo en el puerto de mi recalada.(humildemente )
Liza!! Qué onda, que gustazo toparte por este otro mundo... un abrazo, pásele a leer más seguido, yo haré lo mismo.
ciao!
tonta tonta tonta yo...
felicítame porfa a la madre tuya de ti!!! :)
abrazos, e.
This poison comes instruction free... I don't know about you, but I'm drinking
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